Esteban Ocampo es un artista que se dedica a pintar ideas, experiencias y memorias que encuentra en su cabeza. La pintura, como su aliada, le permite recrear innumerables escenas y hacer de sus imágenes lugares atemporales donde es posible sentirse a gusto. Pese a ser muy personal, su obra está atravesada por elementos externos que lo acercan a un estilo cargado de influencias multi culturales que no solo están arraigadas a la era digital en la que creció, sino a la historia del arte occidental que estudió mientras estaba en la universidad, y a las experiencias que ha vivido en Nueva York desde que se mudó en el 2013.
EXCLAMA charló con él acerca de su visión del arte, su trayectoria y producción personal, y sus proyectos a futuro.
EXCLAMA: ¿Cuál es su visión del arte?
Esteban Ocampo: Para mi el arte es un instinto. Así como el ser humano tiene necesidades biológicas, así como el cuerpo a veces no responde frente a lo que la cabeza ordena; así mismo, el arte, es una manifestación del querer expresarse. «Arte» es un término que se le dio a la acción de expresarse, pero nadie se la inventó, nadie se sentó a pensar hasta que se le ocurrió pintar cuevas, simplemente sucedió como algo innato a nuestra naturaleza de seres pensantes. Sea el tipo de expresión que sea, el arte es una de las pocas maneras que permiten que uno sea uno mismo.
EXCLAMA: ¿Cuál cree que es la naturaleza de su trabajo?
Esteban Ocampo: Mi obra está basada en mis memorias y experiencias, pues de ahí saco todo el material para construir mis imágenes. La naturaleza de mi trabajo puede estar relacionada al enfoque que tengo hacia cómo se siente un cuadro, cómo hacer para que esa pieza realmente se perciba como una recopilación de experiencias que la inspiraron. Hace mucho tiempo mis intenciones eran altamente formales, hoy en día me preocupo por alcanzar un imaginario mas único con respecto a la imagen que tengo en la cabeza y quiero traducir al lienzo para ser capaz de sentir, oler o ver aquello que sentí, vi u olí cuando esas memorias estaban siendo escritas.
EXCLAMA: ¿Cómo describiría su estilo?
Esteban Ocampo: Creo que mi estilo tiene sus raíces en una estética muy contemporánea que se está haciendo cada vez mas fuerte. Podría intentar describirla como una mezcla de collage, perspectiva jerárquica, iconografía bizantina, expresionismo alemán y color. Me interesa mucho jugar con la perspectiva y combinar lenguajes distintos en una misma pintura, al tiempo que pinto algo que tengo en mi cabeza en la misma composición donde hay elementos fieles a la observación detallada. Todo es un juego de contrastes.
EXCLAMA: ¿Cuál es su lugar como artista en el exterior?
Esteban Ocampo: Pese a que mi obra no es política, el simple hecho de ser colombiano hace que ésta cargue con preconceptos que están guiadas hacia las drogas, la violencia y el narcotráfico, sobretodo frente a esas personas que no han oído mas que eso acerca de Colombia. La forma cómo se ve el arte colombiano a nivel internacional, o por lo menos acá en Nueva York, está ligada a esa carga. Sin embargo, la gente parece estar muy abierta a cualquier posibilidad y me parece muy curioso que después de explicar mi trabajo o darme a conocer, la gente borra todo preconcepto de su cabeza y acepta con alegría la idea de un artista colombiano que pinta acerca de lo afortunado que ha sido en la vida. Pienso que el arte colombiano se está abriendo un espacio muy importante en la escena global actual, por mas importante que haya sido Botero en el siglo pasado, ya no es el único artista que se menciona cuando se habla de pintura colombiana, y eso sin duda es significativo.
EXCLAMA: Su pintura me recuerda la obra de algunos artistas colombianos de la década del 50, en el que la figura tiene especial importancia. En cuanto a su producción, ¿por qué decidió apegarse a lo figurativo?
Esteban Ocampo: A mi la figura se me hace un recurso inagotable. La figura humana es infinita y el arte figurativo, en el cual uno reconoce formas, incluso si la figura humana no está presente en la imagen, es aún mas amplio y ofrece cualquier cantidad de interpretaciones. Me parece muy interesante encontrar un lenguaje único en todo este mar de interpretaciones, así que por mas que me atraiga también el arte abstracto, o la instalación o cualquier obra conceptual que tenga un impacto en mi, lo figurativo siempre va a ser aquello que me hizo encontrar mi vocación artística, pues fue en ese momento que me di cuenta que nunca me iba a cansar de hacer esto.
EXCLAMA: ¿Qué lo llevó a escoger la pintura como medio?
Esteban Ocampo: Terminé usando el óleo después de un proceso muy orgánico. Dibujé toda mi vida, nunca pensé en ser pintor de profesión, nunca entendí como funcionaba la dinámica. Cuando empecé mi pregrado en la Javeriana, después de unos cuantos semestres de dibujo y grabado, la manera mas natural de continuar explorando mi proceso creativo y el modo en el que quería transmitir ideas a imágenes, fue a través de la pintura al óleo. Me gusta pensar en el óleo como un material que me invitó a probarlo, estaba ahí esperando a que yo me enamorara. Después de empezar a usarlo, una de las cosas que mas me atrajo es que nunca deja de enseñarme. Pienso en el óleo como leer; no es simplemente pintar, es el acto de enfrentarme a un material que puede ser infinito, lucharlo, responder a sus demandas y al mismo tiempo siempre ser consciente de cuán humilde me vuelve su sencillez. Uno ejercita la cabeza tanto como lo hace cuando lee. Técnicamente, me encanta lo flexible que es y todo lo que se puede hacer con lo que ofrece, prácticamente se puede traducir a pintura cualquier cosa que exista o no, de una manera muy tangible y bonita.
EXCLAMA: Explorar su trabajo significa encontrar una serie de referencias no solo a la cultura contemporánea, sino a la cultura pop. Algunos de estos elementos ya no aparecen en las última series, por ejemplo, lo que da paso a la inclusión de conceptos mas frescos. ¿Cómo cree que ha evolucionado su obra desde que empezó hasta el día de hoy?
Esteban Ocampo: Antes de empezar a pintar y cuando empecé a hacerlo, mis intereses estaban muy centrados en traducir fielmente un referente que por algún motivo me había cautivado y quería pintar. Mis primeras clases de pintura siempre tuvieron modelos en vivo y el arte que mas me atraía se acercaba mas a la cuestión de la habilidad técnica y no tanto a la conceptual. Sin embargo, siempre me ha interesado un poco de todo lo que se ve, y siempre y cuando alguna obra me mueva las entrañas acepto su origen y su objetivo, así que si alguna pintura del expresionismo abstracto, por ejemplo, me hacía pensar en lo que sentía al verla, era suficiente para ser capaz de reconocer que me interesaba.
A medida que fue pasando el tiempo, mis intereses fueron cambiando y uno de los momentos críticos en el cual mi pintura tomó otra dirección fue cuando empecé a pintar con base en mi imaginación y mi memoria. Una vez dejé de lado los referentes fotográficos, mi pintura empezó a hablar otro lenguaje, empecé a tomar riesgos y a enfrentarme a lo que verdaderamente veía en mi cabeza. No hay nadie en el mundo que me pueda decir que lo que pinto no se ve así dentro de mi . Fue allí cuando me empecé a preocupar por alcanzar una descripción precisa de cómo quería que la imagen se sintiera, no tanto por deslumbrar con mi técnica, sino por alcanzar una universalidad en cuanto a la forma en la que se ven mis pinturas, en relación con valores significativos que cada ser humano siente, como el amor, la familia, el humor, la pasión, la tragedia, entre otros.
EXCLAMA: ¿Qué tipo de asociaciones guardan entre sí las partes de la obra: su carácter figurativo, la esencia atemporal, la sugestión de un recuerdo y el uso de la pintura como medio?
Esteban Ocampo: Cada una sirve como un medio para alcanzar la imagen que quiero pintar. Cuando se pone en perspectiva, la pintura puede ser maquiavélica, cualquier medio necesario para alcanzar aquello que se quiere pintar.
EXCLAMA: ¿Cuál es su papel dentro de las obras como tal? ¿Cómo funciona como artista dentro de ellas?
Esteban Ocampo: No tengo claro mi papel como artista en las obras mas allá de ser quien las pinta, una vez terminadas cogen vida por sí mismas, así que pensaría en el papel que podría jugar una vez están fuera de mi alcance: el de haberlas pintado, en su mayoría, desde un momento de total honestidad y exploración frente a aquello que en ese instante sentía era lo correcto a pintar. Ultimamente mis obras son mas íntimas y autobiográficas, así que cuando existen en el mundo real, mi rol se vuelca al hecho de poder ser juzgado y de dar pistas sobre quién soy, en ese momento puede ser mas honesto y aún mas abierto.
EXCLAMA: ¿Existen artistas a los que les siga el rastro?
Esteban Ocampo: Una cantidad tan grande que ni siquiera podría nombrarlos a todos, pero acá van algunos nombres: Nicolás Uribe, Gabriel Silva, Ruprecht Von Kaufmann, Nicole Eisenman, Neo Rauch, Matthias Weischer, Dana Schutz, Tom Sanford, JP Roy, Peter Drake y Vincent Desiderio.
EXCLAMA: ¿Qué viene para Esteban Ocampo?
Esteban Ocampo: Por ahora estoy en el proceso de aplicar a la visa O-1 para quedarme en Estados Unidos, que solo se le otorga a personas con habilidades extraordinarias que pueden ser valiosas para el país. Proyectos a largo plazo tengo, pero por ahora estoy enfocado en llevar a cabo el proceso para quedarme acá para así aprovechar toda esta comunidad que he construido y todo el apoyo que he recibido por medio de esas personas. La semana pasada me ofrecieron una exposición individual: Salpicón con Ñapa, mi segunda acá en Nueva York. Se llevará a cabo en la galería Gitler & ___ desde el 30 de junio.
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