Tal vez el nombre Manu Le Malin no dispare muchas alarmas, sin embargo, este francés es uno de los maestros del hardcore techno; un Dj y productor que lleva más o menos 20 años recorriendo el mundo con sus vinilos, llenando la cabeza de los aficionados al género con su música.

Apartado de la escena comercial, Emmanuel Dauchez, como es su nombre real, ha conseguido un sonido propio a través de la constante exploración no solo musical, sino también artística. Seguidor del arte biomecánico y de las formas de expresión crudas, ha conseguido hazañas tan significativas para el género como grabar su vídeo set Biomechanik dentro de la mansión Giger, y llevar a cabo una pieza sinfónica en colaboración con el legendario compositor francés René Koering.

Le Malin, quien además de mezclar y producir hardcore, experimenta con el techno a través de su alter ego The Driver, habló con EXCLAMA al respecto de su sonido, HR Giger y la cultura rave de principios de los noventa.

Es muy difícil encontrar información al respecto suyo tanto en los medios como en la Internet. ¿Es algo que hace a propósito?, ¿es su intención mantenerse alejado de ellos?

En los días cuando tuve proyectos como Biomechanik, mi álbum o otras cosas, hice lo que tenía que hacer con los medios de comunicación (franceses) como radio, tv o revistas. Entonces llegó Internet. me tomó tiempo entrar en esta nueva era; por ejemplo abrí mi cuenta de Facebook hace cuatro años, entonces vi que la gente había creado páginas o grupos sobre mí. Me tomó (de nuevo) tiempo contactarlos, hasta que finalmente se convirtió en la nueva forma de comunicarme; sin embargo estoy tratando de hacerlo según mi forma de ser, es decir, que si hay una razón para publicar algo en esas páginas lo hago. No es un máquina de promoción para mí, estoy tratando (dentro de mi poco nivel, pues mi número de followers no es extremadamente alto) de compartir mis gustos gráficos, en dibujo y pintura, otros músicos, etc… Y cuando tengo un buen proyecto para hablar se lo dejo saber a algunas pocas personas, y dejo que la Web haga el resto, supongo. Yo no me siento cómodo con el egocentrismo, que es la religión de las redes sociales. Me puedo considerar afortunado, pues la gente que sigue mis páginas realmente no se queja sobre el hecho de que yo no reacciono al respecto de los comentarios, o no respondo sus mensajes todo el tiempo. Ellos realmente respetan mi manera de manejarlo, y yo realmente les agradezco por eso.

 Antes de conocer el hardcore ¿qué tipo de música solía escuchar?

 ¿Te refieres a antes de la música electrónica? Estuve interesado por un largo período en el rock, el ska y el soul, y todavía los escucho. Cuando era joven mi madre compartió conmigo su amor por cantantes francesas como Barbara, Edith Piaf. También tuve una época en la que me interesé en el punk y la música de la clase obrera del Reino Unido, como por ejemplo Sham 69. El hip hop, el metal y el grind vinieron durante los noventa, pero yo ya estaba muy metido en el techno. Lo mismo sucedió con el hardcore (el genero roquero). Realmente no interesa si te empieza a gustar una banda o artista 50 años después, desde que lo disfrutes.

¿Cómo conoció el estilo de vida de los raves al cual hoy se dedica de lleno?

 Cómo lo dije antes, yo estaba muy interesado en la música. Iba a conciertos, compraba colecciones enteras de discos e iba a clubes desde muy joven: en 1990/91 frecuentaba clubes en París, luego empecé a ir a los after parties y así. Muchos de esos lugares eran fiestas de la escena gay, en donde tocaban las primeras tonadas dance y house. Para mi la música más la manera en la que la gente (gay o no) se divertía, no de la manera en la que lo hacían en las viejas discotecas, realmente me atrajo. Un día unos amigos con los que me veía fin de semana tras fin de semana me dijeron que viniera a un rave para que viera que algo estaba sucediendo. Ellos tenían razón, me enganché desde el primer momento.

¿Cómo llegó el hardcore a su vida?

 Hardcore es una palabra enorme que todo el mundo usa. Hardcore esto, hardcore aquello… Bla, bla, bla. Como y cuando la música que yo estaba tocando se tornó más pesada y oscura, no lo se. Si revisas mi background este es mucho más soul y música negra que música extremadamente ruidosa. Me expreso como viene ¿Es mi vida o soy yo hardcore? Para nada. Es tan solo la forma en la que viene, y si tengo algún tipo o estilo de vida este es privado. No quisiera dar una falsa imagen o crear un personaje falso estilo “La vida es un asco ¡Hardcore verdadero!” Jajaja.

 ¿Quién fue primero, Manu Le Malin o The Driver, su alter ego techno?

Le Malin, desde luego. Pero el otro apareció justo después, hace más o menos 15 años.

¿Disfruta de la misma manera tocar hardcore que techno?

Claro, los necesito a ambos, de otra manera me aburro. Es realmente un acercamiento muy diferente el tocar techno. En este momento toco mucho más techno y me siento como un recién llegado, pues la audiencia no me conoce lo suficiente; y realmente disfruto ese sentimiento de comenzar todo de nuevo, además las producciones son increíbles y se encuentran en vinilo. Si, con el techno me siento como al principio.

 ¿Que significa para usted HR Giger?

 Es uno de los grandes artistas de todos los tiempos. Su arte es muy intenso, y permanecerá en la memoria colectiva sin importar que, como Picasso y Dalí. Conocí personalmente al maestro y para mi ese es uno de los mejores regalos.

¿Cómo consiguió grabar su vídeo set Biomechanik en la mansion Giger?

 A mi amigo Dj Kraft, quien estaba encargado de la disquera UWE, junto a Laurent Ho, se le ocurrió la loca idea. En el momento yo pensé que no habría manera de que Giger aceptara, ¿quiénes éramos nosotros para pedirle algo de tal magnitud al maestro? Pero Kraft me dijo “Tu conoces al manager de Giger, pregúntales y ya veremos”. Kraft estaba en lo cierto. Después de una reunión el manager, quien me presentó a Giger en el 97, le dio un empujón al proyecto y las puertas se abrieron.

 ¿A HR Giger le gustaba el hardcore?

No. Su manager y yo le describimos que clase de música era. Conocía el techno, pero pertenecía a una generación que experimentó la música pesada y el noise extremo mucho antes de que la palabra hardcore existiera.

¿Cómo definiría usted con palabras el sonido biomecánico?

Prefiero dejar que la gente arme su propia definición

Pensando en el concierto en Montpellier, el proyecto sinfónico titulado Ayer, hoy, mañana, hecho en colaboración con Torgull y el compositor René Koering en el año 2000, ¿cómo funcionó el proceso de ensamblaje de esa pieza sinfónica con los toques electrónicos para el show en vivo?

Un gran y organizado desorden. Contarte todo el proceso aquí sería muy largo, pero si te puedo decir que fue una gran experiencia tanto para Torgull como para mi, y los músicos de la orquesta. Incluso algunos de ellos, a quienes en realidad no les entusiasmaba mucho el proyecto, cambiaron su forma de pensar después de la primera presentación.

Fue René quien se acercó a nosotros. Lo más divertido fue que después de la primera vez que nos escuchó tocar apartes de nuestra música dijo: “Hmm… No es tan pesado después de todo”. Como Giger, él había experimentado con el noise, con alguna maquina grabadora extraña y con música concreta y totalmente experimental; así que dos ravers tatuados haciendo música electrónica en el 2000 no le resultamos nada extraños.

Empezó a producir su propia música a principios de los noventa, ¿cómo fue ese salto para usted?, ¿cómo consiguió encontrar su propio estilo?

No lo se, tan solo vino a mi. No busco “un estilo” en vivo o en el estudio. Toco y hago lo que siento, y lo que me inspiró en cierto momento. Es la razón por la cual, probablemente, mis tracks resultan un poco diferentes el uno del otro y también la razón por la cual tampoco produzco demasiado. Respeto a aquellos que van todos los días al estudio a producir tracks. Yo simplemente no puedo hacerlo así.

Leyendo lo que se puede encontrar sobre usted, es claro que las acciones que ha llevado a cabo con respecto al hardcore tienen que ver con una lucha por abrir espacios para el genero. ¿Considera que ha logrado avances en este campo a lo largo del tiempo? ¿Cuál cree que ha sido el mayor?

La escena y la música varian tanto de un país al otro. En Francia éramos, junto con muchos otros artistas y actores, parte de algo. El hardcore no morirá. Esto no es solo una afirmación, es cierto. Recientemente una revista francesa publicó todo un número sobre hardcore techno. El lado pesado de cualquier clase de música o arte es siempre una especie de comienzo, debido a que es la manera más cruda de expresarse y desde ahí es posible ir en cualquier dirección; sin embargo, siempre asustará un poco a la gente por su crudeza, una crudeza que va hasta la médula.

Foto: Rita Dagaz

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