El Tequila es una pasión que perdura. Una bebida que lleva la historia de México en su sabor. Unas extraordinarias almas de esta cultura apasionadas por los buenos sabores y detalles elaboraron el Tequila Don Julio, una bebida de agave con mucha tradición excepcional con una profundidad y delicadeza.
Pensada para ser anfitriona en las conversaciones entre amigos, Don Julio innovó con una botella de talle bajo para que no se interpusiera en la charla y sorprendió logrando un sabor único, al plantar el fruto de forma más separada que de costumbre, en un suelo cuyas propiedades cosechaba agaves más dulces que el resto de las destilerías de su tiempo.
Esta historia apasionante, inspiró a EXCLAMA a proponer los siguientes maridajes:
Tequila Don Julio Blanco
La ligereza del tequila Don Julio Blanco cae muy bien con pescados y mariscos. Por ejemplo los camarones salteados, que son una preparación sencilla pero sustanciosa, donde se cocinan sobre chile rojo, mantequilla, cilantro, limón y ajo, balancea la fuerza de los condimentos, con la textura propia de los camarones.
Tequila Don Julio Reposado
Cochinita pibil es un plato de cerdo que va perfecto con el tequila Don Julio Reposado. Originario de la península de yucatán, consiste en una técnica de horneado para la carne que previamente se adoba con achiote, naranja agria, hojas de plátano y cebolla roja, resaltando así sus jugos gracias al vapor.
El tequila reposado se recomienda también con otros típicos mexicanos, como tacos y enchiladas en sus versiones veganas, para aquellos que prefieren abstenerse del consumo de productos de procedencia animal.
Las notas de frutas maduras, más vainilla, hacen sedoso y cálido el final de un Don Julio Reposado, dándole versatilidad a la hora de combinar con platos de vegetales y carnes.
El tequila Don Julio Añejo va mejor con platos bien fuertes, donde las carnes rojas sean protagonistas, como fajitas, steak pimienta o hamburguesas. La carne a la llanera es un plato colombiano que resulta más sencillo de preparar de lo que parece y funciona muy bien con el tequila añejo. Solo se necesitan tiras de ternera anteriormente reservadas en aliño colombiano para asar en palos de madera o hierro.
El tequila añejo es indicado también para platos de dulce, como el Mousse de chocolate negro y naranja, crema, trozos de chocolate negro y la ralladura de la cáscara del cítrico, hasta lograr una textura airosa, esponjada. El sabor maduro de este trago genera una composición aromática que reinventa este postre clásico.
Tequila Don Julio 70
Para el tequila Don Julio 70, que es el primer tequila añejo cristalino del mundo, la ensalada griega de queso feta es una excelente pareja. La frescura de que caracteriza este trago conjuga con lo aromático del orégano y el cilantro y lo balsámico de las aceitunas negras. Resalta la blancura y lo magro del queso y los puntos más fuertes de ingredientes como la cebolla y el pimentón.
Usualmente se piensa que es difícil maridar comidas con destilados, pero el tequila Don Julio ofrece en sus cuatro variedades un perfecto acompañamiento a las comidas de estas fiestas. Es la mejor opción para los que están aburridos de los tradicionales fermentados, en búsqueda de sorprender a la familia y los amigos con una bebida que tiene una personalidad consistente y un suave sabor.
Este artículo ha sido patrocinado por DIAGEO Colombia.