Ser fiel a una identidad en el proceso de reinvención de un sello de moda no es tarea fácil. Sin embargo, el legado de la firma Pepa Pombo logró reafirmarse una vez más en el desfile de inauguración de Colombiamoda en el Parque de las Chimeneas de Itagüí.
La noche del 24 la feria de moda más importante del país se convirtió en una experiencia mágica cargada de elegancia, tradición y sofisticación femenina. Una pasarela de colores cálidos marcaba el camino de los asistentes, que uno a uno se fueron acomodando para ser testigos de la historia de una mujer viajera por el mundo.
Mónica Holguín, hija de Pepa y sucesora de la dirección creativa, rindió un homenaje a su madre mediante la colección “París de Asia”, un trabajo que reitera el poder de los detalles y la dedicación en cada costura. Empezando desde el punto cero, pues incluso la producción de los materiales y el diseño de cada estampado se manejó in-house, y pasando por el tejido de punto (insignia de la marca), esta colección dejó más de una impresión positiva entre los asistentes, fascinados con vestidos convertidos en capas y caftanes ligeros. Cada una de las piezas dibujada a partir de colores primarios mutantes (es decir, diferentes tonalidades del azul, rojo, amarillo), añadiendo toques de naranja con blanco y negro indicaron también de la variación y la mezcla, que pasaban de mallas y transparencias a toques con boleros y caídas fuertes. “Si de colores se trata podría decir que Pepa Pombo by Mónica Holguín son las Dueñas de Pantone en Colombia” opinó Daniela Riaño, blogger experta en moda, y asistente al desfile.
El viaje de estas mujeres, ya sea a través de una Europa invernal, una isla del Mediterráneo o los más exóticos paisajes asiáticos, es acompañado de prendas que además de halagadoras, también resultan versátiles y multifuncionales. Es precisamente esa vida ajetreada y viajera lo que funciona como inspiración para Mónica, mientras nos recuerda por medio del zoom-in de la colección, que la artesanía es la materia prima del lujo contemporáneo, y cada detalle, por más pequeño que sea, crea un todo capaz de deslumbrar a cualquiera. A Mónica, a Carolina, a la misma Pepa, y a toda la familia Pombo (pues ha sido un esfuerzo comunal), solo queda agradecerles por su labor en el mundo de la moda colombiana y augurarles un éxito rotundo (aún más grande que el que hasta el momento han cosechado) a nivel internacional.
¡Bienvenido Colombiamoda 2017!