La anhelada utopía de trabajar en lo que amas ganando mucho dinero, toma forma al conocer a Gray Malin. Nombrado por Linkedin como uno de sus Next Wave: A list of 150 Professionals, 35 and Under, Who are Changing the Way We Do Business, Malin supo combinar su pasión por la fotografía con una nueva manera de vender la belleza y la pasión por viajar.
Conocido por sus fotografías aéreas de playas del mundo, el texano —radicado en Los Ángeles— logra transportar al espectador hacia nuevos lugares mostrándoselos desde otra perspectiva: Una playa en Italia se convierte en una composición geométrica de sombrillas y miles de entusiastas a punto de entrar al agua en Australia, lucen como traviesas pinceladas de colores.
La fascinación por su trabajo se debe precisamente a que cuando vivimos ciertas experiencias estamos tan inmersos que no tenemos la oportunidad de observarlas desde afuera; con Malin vemos una realidad objetiva, como nunca antes, que nos genera una nueva subjetividad sobre ella.
Imaginar, transformar, comparar o inventar son verbos que se activan al estar frente a su obra y es por eso que marcas como la cadena de hoteles Le Meridien realizó el año pasado una campaña para Instagram llamada Follow Me, resumida como un viaje visual de 24 horas a través de la lente de Gray Malin y que incluye imágenes desde Bolivia hasta la Antártida, lugares donde la marca está presente.