Considerado uno de los pioneros del videoarte contemporáneo, Bill Viola con más de 44 años de trayectoria crea obras estructuradas por imagen y sonido, generando entornos envolventes donde el espectador se vea inmerso, alternando composiciones sonoras que van desde tonos electrónicos hasta el silencio total. Con influencias del arte oriental, Viola persigue temas que llevan al extremo de la emoción; la fragilidad de la condición humana y su relación con el mundo que lo circunda, la vida, la muerte y la naturaleza, que emerge como reflejo del alma y halla en el inconsciente el modo hacia un encuentro genuino con la interioridad.
En la instalación THE DREAMERS, Viola explora la relación del agua y el vínculo de la vida con ella. En una habitación acogida por la oscuridad, siete pantallas individuales con siete soñadores inmersos en agua, dormidos o muertos. Estos soñadores flotan tranquilamente bajo movimientos pausados y serenos, unas burbujas ocasionales emergen a la superficie, navegando entre la vida y la muerte, entre la juventud y la vejez.