Entre Hong Kong y Londres, nació, creció y se formó Alexandra Leese, una fotógrafa que con su mirada conceptual tiene cautivado a más de uno.
A los 11 años de edad, Leese llegó a Londres junto con su hermana para continuar con su escuela. Al terminar sus estudios, decidió seguir en el Reino Unido para hacer una licenciatura en arte en Chelsea College Of Art, con la intención de ser retratista.
Comenzó a tomar fotografías para sus trabajos con una cámara – según sus palabras – de mierda. Para ella, ese era el medio para hacer retratos, pero no un camino lleno de posibilidades hacia la creatividad. Por fortuna, uno de sus tutores vio en ella gran potencial para este mundo y compró una cámara de película de 35 mm en el clásico Portobello Road.
Redescubriendo sus habilidades, entró a London College of Fashion para estudiar fotografía de moda y desde entonces tiene contratos con grandes firmas editoriales como i-D, King Kong, Heroine, V Magazine, Office, Document Journal, Vogue Italia, entre otras más.
Su más reciente y aclamado proyecto se conecta con su ciudad natal, Hong Kong. Leese siente mucha afinidad con la cultura y diversidad de su país, y quiso mostrarlo a través de su lente. Con Boys of Hong Kong, la fotógrafa desmantela la tendencia que existe de estereotipar a los chicos chinos como “todos son iguales” y cambiar la perspectiva acerca de la cultura juvenil masculina de la ciudad, trabajando con estudiantes, ilustradores, artistas, tatuadores, patinadores y ciclistas, evidenciando una profunda belleza en cada uno de ellos.
El trasfondo pictórico de sus trabajos está ligado a su habilidad natural de esculpir los cuerpos de sus modelos en formas orgánicas que reflejan elegancia desmedida y relajada. Leese brilla a través de sus lentes con completa armonía y serenidad.