Casas Gemelas Nilo. El contraste del volumen con el entorno ayuda a exaltar la riqueza natural del lugar. Proyecto en conjunto con la arquitecta colombiana Carolina Echeverri. Nilo, Cundinamarca. 2014. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Una constante en la obra de Alberto Burckhardt es la prelación que tienen el entorno natural, el clima y los factores culturales en cada proyecto, acompañados siempre por un diseño sensible y armonioso. Su principal preocupación a la hora de abordar un nuevo proyecto es entender a profundidad el lugar e identificar sus potencialidades, para así estar seguro de sacar el máximo provecho de todas las bondades que ofrece una determinada ubicación en cuanto a elementos tales como la vegetación, fauna, flora, clima, iluminación, precipitación, e inclusive los más etéreos como la temperatura, los paisajes, las sombras, los sonidos y la brisa. Consiguiendo llegar a resultados con una alta riqueza y agudeza sensorial, de confort y relajación, que hacen que cada uno de sus proyectos sea un culto a la naturaleza y al cuerpo, y por ende, un deleite para los sentidos de quien los habita.
En su amplio portafolio destacan principalmente viviendas unifamiliares, multifamiliares, y hoteles de alto rango en una gran variedad de regiones a lo largo y ancho de Colombia, que dan cuenta de un lenguaje arquitectónico único que Burckhardt ha ido forjado a través de los años. La geometría de sus volúmenes se basa principalmente en formas puras y contundentes que están dispuestas en el territorio de una manera estratégica, que además buscan sublimar y enmarcar el paisaje inmediato y lejano para así incorporarlos y hacer de estos parte activa del diseño. Así mismo, los espacios interiores son amplios, generosos y bondadosos en cuanto a materiales y elementos, donde principalmente se utilizan la piedra, la madera, el concreto, el agua, la vegetación y la luz, siempre coexistiendo en equilibrio y armonía. Estas son algunas de sus obras más representativas:
Casas Gemelas Nilo. Nilo, Cundinamarca, Colombia. (2014)
Casas Gemelas Nilo de noche. La iluminación y la vegetación hacen parte del diseño y la composición del espacio. © Juan Antonio Monsalve
En este proyecto cohabitan en el paisaje dos volúmenes independientes con un mismo diseño arquitectónico, que se caracteriza por utilizar geometrías puras y escrupulosas donde el concreto a la vista resalta en medio de la espesa vegetación tropical. Al concreto lo complementan la madera, la piedra y elementos naturales como el agua y la vegetación. Así mismo, la cuidadosa manera en la que fueron empleados estos materiales y volúmenes hace que haya una complementariedad entre las formas geométricas y la naturaleza. En cuanto al interior, los espacios son amplios, generosos, cuidadosamente dispuestos y articulados entre ellos, y con una muy buena iluminación y ventilación natural, logrando los altos estándares de confort que se pretendían.
Casas Gemelas Nilo. Coexistencia armónica entre los diferentes materiales y volúmenes entre ellos y con el entorno circundante. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Casa Pierino. Barú, Bolívar, Colombia. (2003)
Casa Pierino: Un híbrido entre la arquitectura contemporánea y vernácula. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Situada en la Península de Barú, en la costa caribe colombiana, en esta residencia se mezclan un estilo contemporáneo minimalista con elementos vernáculos propios de la tradición constructiva caribeña, como lo son el techo en paja tejido sobre el gran salón y otros detalles de trabajos artesanales propios de esta cultura, así como la implementación de materiales y técnicas contractivas nativas. Esto hace que sea fresca y moderna sin dejar de ser autóctona, y que a su vez esté en sintonía con el lugar donde se emplea. Aquí, el mar y la espesa y húmeda selva tropical se convierten en factores determinantes a la hora de diseñar; se aprovecha al máximo la vista al océano y cada uno de los espacios interiores fue diseñado teniendo en consideración los elementos naturales como el agua y la vegetación. La piscina y la terraza exterior articulan diferentes partes de la casa logrando integrar de una manera casi imperceptible el interior con el exterior, llevando la naturaleza a la casa y viceversa.
Casa Bessudo. Cartagena, Bolívar, Colombia. (2004)
Casa Bessudo. El agua como protagonista en esta casa ubicada en el Centro Histórico de Cartagena. © Alberto Burckhardt Arquitectos
El criterio principal en la intervención y remodelación de esta casa colonial en el Centro Histórico de Cartagena gira en torno a la implementación de una gran superficie de agua en el nivel de acceso, integrando el patio, el antiguo aljibe y la piscina que se ubica en el costado posterior por medio de este gran eje articulador. El agua fluye entre la estructura colonial del aljibe, rompiendo con la dureza de la piedra y generando una atmósfera refrescante y relajante. Así mismo, la luz cálida e indirecta en constante diálogo con la vegetación, la brisa, el movimiento del agua y los otros elementos del espacio, ayudan a embellecer aún más esta casa. Otro elemento que destaca en esta construcción es el imponente mirador con vista al Centro Histórico y al mar, convirtiéndola en una valiosa pieza del patrimonio arquitectónico colombiano.
Casa Bessudo. Armonía entre los diferentes materiales que se emplean en esta construcción. Respeto por la estructura y la huella antigua donde predominan los arcos y las bóvedas. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Kamadhenu Yoga Center. Subachoque, Cundinamarca, Colombia. (2013)
Kamadhenu Yoga Center. Espacios interiores y patio central. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Kamadhenu, al ser un espacio pensado para la práctica del yoga y la meditación, tiene un espíritu neutro y sobrio, de esta manera adjudicándole a la naturaleza y el entorno el protagonismo principal. En esta medida, el patio central se convierte en el elemento más importante de la construcción, pues además de representar la idea de centro o núcleo, se convierte en el principal portón y vínculo entre el exterior y el interior. Dispuestos alrededor de este centro hay tres módulos articulados entre ellos por un gran corredor, y el patio descubierto es el remate de estos ejes, donde confluyen en armonía diferentes elementos naturales y artificiales como el cielo, las montañas, los árboles, el agua y el fuego (la presencia eterna de los cuatro elementos), y un gran altar donde posa una estatua de Buda, considerado el guardián de este santuario.
Kamadhenu Yoga Center. El patio central, el Buda y el fuego que simboliza el centro y sustento de vida. © Alberto Burckhardt Arquitectos
Tanto el acceso y la salida como los distintos recorridos tienen implícitos un carácter ritual y ceremonial, y hay una idea de ascenso y descenso que está presente en todo el proyecto. Así mismo, los espacios principales tienen unas cubiertas inclinadas y grandes ventanales que permiten integrar y enmarcar el paisaje en los espacios interiores, y a su vez proyectar estos hacia el exterior. Los materiales que se utilizaron fueron el concreto, la madera, la piedra y el vidrio que se equilibran entre sí, tal como lo explica el arquitecto: “la madera da la calidez, el concreto la solidez, la piedra la conexión con la tierra y el vidrio el reflejo de la luz”. A su vez que le brindan al espacio serenidad, belleza y austeridad, donde la luz cumple con un papel fundamental en la composición.
Hotel Bioxury. Bogotá D.C., Colombia. (2011)
Hotel Bioxury. Bogotá, Colombia. © Alberto Burckhardt Arquitectos
El diseño de la fachada de este exclusivo hotel en la ciudad de Bogotá busca establecer un diálogo con la vegetación del parque aledaño; el vidrio refleja la luz y las persianas verticales de aluminio color madera entablan un diálogo con los árboles y la vegetación del exterior y las montañas que se dibujan a lo lejos. Así mismo, en el diseño destaca un juego de volúmenes dislocados, retrocedidos y extruidos de manera aparentemente aleatoria, dándole dinamismo y movimiento a la fachada a la vez que se generan espacios y terrazas con la intención de relacionar aún más el edificio con el entorno vegetal y urbano, que junto con otras estrategias, como los ventanales, las dobles alturas y las paredes verdes, o vegetales, hacen que haya una extensión del parque al interior del edificio y viceversa, rompiendo con los límites fijos entre el interior y el exterior. Todo esto sumado a un diseño sobrio, elegante y contemporáneo que lo convierten en un auténtico referente urbano.
Escrito por Andrea Serpa Marroquín