En su texto La memoria, la historia, el olvido, el filósofo Paul Ricœur advertía que “Recordar no es repetir, sino reinterpretar”. La exposición Gruta, del artista colombiano Asicaz Monzón-Aguirre Ortiz, inaugurada en abril de 2025 en el Museo de Antropología y Artes de Jericó, plantea una reflexión contundente que sin duda resuena con el filósofo: el olvido no es una pérdida pasiva, sino una fuerza activa; es un gesto que moldea la historia, la identidad y la pertenencia. Así, como señala el curador Andrés Galeano, el acto de olvidar puede ser “tan afilado como un cuchillo o tan sutil como un velo que se posa sobre la memoria”. La exposición enfrenta el olvido, lo interroga y lo encarna en una serie de obras que invitan al espectador a atravesar capas de significado.
In his text Memory, History, Forgetting, philosopher Paul Ricœur warned that “To remember is not to repeat, but to reinterpret.” The exhibition Gruta by Colombian artist Asicaz Monzón-Aguirre Ortiz, inaugurated in April 2025 at the Museum of Anthropology and Arts of Jericó, presents a powerful reflection that undoubtedly resonates with Ricoeur: forgetting is not a passive loss, but an active force; it is a gesture that shapes history, identity, and belonging. As curator Andrés Galeano notes, the act of forgetting can be “as sharp as a knife or as subtle as a veil that settles over memory.” The exhibition confronts forgetting, interrogates it, and embodies it through a series of works that invite the viewer to traverse layers of meaning.
A través de la intervención de objetos arqueológicos y religiosos con materiales como textiles, esmalte de uñas y otros medios, Asicaz establece una tensión efectiva entre memoria y desaparición. El velo (recurrente en la muestra), actúa tanto como gesto de protección, así como de ocultamiento, convirtiéndose en un eco de las prácticas rituales litúrgicas y, al mismo tiempo, un guiño a la estética queer mediante el uso del color morado.
Through the intervention of archaeological and religious objects with materials such as textiles, nail polish, and other media, Asicaz establishes an effective tension between memory and disappearance. The veil (a recurring motif in the exhibition) acts both as a gesture of protection and as a form of concealment, becoming an echo of liturgical ritual practices while simultaneously serving as a nod to queer aesthetics through the use of the color purple.
El recorrido por Gruta ofrece al visitante un proceso de descubrimiento paulatino. La exposición incluye réplicas de artefactos precolombinos como una alcarraza Tumaco-La Tolita, un poporo Quimbaya y una urna funeraria de la región del Magdalena, además de iconografía cristiana como un Sagrado Corazón y una escultura de Santa María Laura Montoya, figura histórica del municipio.
The journey through Gruta offers visitors a gradual process of discovery. The exhibition includes replicas of pre-Columbian artifacts such as a Tumaco-La Tolita alcarraza, a Quimbaya poporo, and a funerary urn from the Magdalena region, alongside Christian iconography such as a Sacred Heart and a sculpture of Saint María Laura Montoya, a historical figure from the municipality.
En este diálogo entre objetos indígenas y católicos, Gruta plantea preguntas, probablemente incómodas, sobre la manera en que construimos nuestras narrativas históricas, y sugiere nuevas formas de interpretación, conectando la herencia ancestral y religiosa de la región, con reflexiones contemporáneas sobre identidad, género y pertenencia. En un lugar como Jericó, donde la memoria histórica y la identidad religiosa están profundamente entrelazadas, Gruta ofrece una mirada provocadora sobre los mecanismos de recuerdo, olvido y transformación cultural.
In this dialogue between Indigenous and Catholic objects, Gruta raises —often uncomfortable— questions about the ways we construct our historical narratives, and suggests new forms of interpretation, linking the region’s ancestral and religious heritage with contemporary reflections on identity, gender, and belonging. In a place like Jericó, where historical memory and religious identity are deeply intertwined, Gruta offers a provocative perspective on the mechanisms of remembrance, forgetting, and cultural transformation.
¿Cuál sería una de las cualidades o características innegociables en tu trabajo? Es decir, algo que siempre debe estar presente en tus proyectos.
Mi compleja relación con el territorio (Antioquia/Colombia/Norte de Los Andes/Latinoamérica) como persona que ha sido forzosamente desplazada en su infancia / exiliada en EE. UU. (e influenciada profundamente por los movimientos norteamericanos de derechos civiles) y como diáspora que ha decidido retornar.
What is one of the non-negotiable qualities or characteristics in your work? In other words, something that must always be present in your projects.
My complex relationship with territory (Antioquia/Colombia/Northern Andes/Latin America) as someone who was forcibly displaced, during childhood, exiled to the United States (and deeply influenced by the North American civil rights movements), and as part of a diaspora that has chosen to return.
¿Cómo nace el interés puntual por trabajar sobre la iconografía tradicional popular latinoamericana?
Se conecta a la pregunta anterior. Tiene que ver con mi interés por la región, desde lo existencial, étnico e identitario, mi apego a ella (producto del destierro) y mi identificación con ella en el exilio a través de objetos de mi familia, tradición oral, libros y el internet. Buscar la iconografía latinoamericana ha sido una forma de buscarme a mí mismo, a mi familia y a mi comunidad. Pensar en arte popular como referente ha sido una forma de mirar más allá de la historia del arte hacia diversas prácticas, imágenes y motivos que se relacionan con lo artesanal y antropológico y que considero relevantes dentro de lo que yo hago con mi obra, que es arte, pero sobre sobre todo es conmemoración y autoafirmación a través de la cultura material.
How did your particular interest in working with traditional popular Latin American iconography emerge?
It connects directly to the previous question. It stems from my existential, ethnic, and identity-driven connection to the region — my attachment to it (as a result of displacement) and my identification with it during exile through family objects, oral traditions, books, and the internet. Seeking out Latin American iconography has been a way of searching for myself, my family, and my community. Considering popular art as a reference has allowed me to look beyond traditional art history toward diverse practices, images, and motifs related to the artisanal and the anthropological — elements I find deeply relevant to what I aim to do with my work, which is not only art but, above all, commemoration and self-affirmation through material culture.
Arte y producción: Asicaz Monzón-Aguirre
Asistencia en producción: Daniel Moná
Fabricación: Asicaz Monzón-Aguirre, Daniel Moná, Santiago Isaza, Sol Tabares, María Fernanda Zuluaga
Bordados: Paula Urriago
Pintura: Juan Carlos Correa Gómez
Tallado en madera: Sigifredo De Jesús Cardona
Registro fotográfico: Felipe García