Axiom se convierte en una atracción de luz divertida y alucinante en Praga. El artista australiano Kit Webster creó un edificio lleno de paisajes sonoros donde las pulsaciones lentas y las percusiones rápidas son las protagonistas junto a la luz que las acompañan.
Webster decidió reinventar la forma de disfrutar un festival. Axiom se instaló en el Signal Festival y fue un éxito al combinar lo que es virtual mediante la obra y lo que se vive en el momento en torno a el evento. Se nota que no existe barrera alguna en la imaginación, y llevándolo a la realidad gracias a la tecnología, Webster logró técnicas de composición de luz mediante un espacio alternativo y lleno de música.
La forma y la iluminación se convierten en una matrix que se compone de 700,000 LEDs que viajan en tres arcos simétricos donde el poder que tienen los beats de la música dejaron hipnotizados a los asistentes de este festival.
Elementos como la luz, el sonido, el tiempo y el espacio fueron estudiados para que se pudiera romper con las instalaciones convencionales de este tipo de eventos y sobresaliera como una experiencia absolutamente sensorial, única y vivaz.
La experimentación digital y espacial se da en todo sentido cuando la música y la luz bailan armoniosamente por medio de estos arcos sumergiendo a las personas en un momento de alucinación natural donde el diseño, el arte y la tecnología se unen creando una atmósfera de creatividad y un paraíso tecnológico que a la ves es palpable ya que se puede vivir en tiempo real.